Por: Olindo Aliaga Rojas
INTRODUCCIÓN
Aparte de algunos artículos sueltos y una ligera monografía del escritor Nazario Chávez Aliaga editado hace 52 años, los escritores y estudiosos sucrenses tienen como tarea pendiente escribir la historia acabada y totalmente actualizada de Sucre.
Los intelectuales como tales no pueden soslayar el deber de escribir la historia de Sucre y escribirla con pasión, sin apasionamiento, con veracidad de los hechos, sin modificarlos, ni trastocarlos porque ello acarrea confusión donde hay ignorancia y sombras donde hay oscuridad. “El terruño es la patria del corazón”, ha dicho José Ingenieros, escribir su historia de manera clara, veraz y documentada nos llevará a conocerla y evitará repetirla.
Los hombres y los pueblos sin memoria nada sirven, volvemos a sostener como José Ingenieros: “Al pueblo no se le ama porque se ha nacido en él, sino porque allí nos hemos formado”.
La presente Historia abreviada de Sucre ha sido elaborada con la pretensión de hacer conocer a los hijos de Sucre un poco de nuestra tierra, nuestra pasión querida, para salir de la tenebrosidad que nos cobija; con esta Historia abreviada también queremos decirles a aquellos que lideran la cultura en Sucre que un pueblo que no conoce su historia, ni reconoce sus errores, inevitablemente volverá a cometerlos en el futuro.
UBICACIÓN
Geográficamente Sucre está ubicado en la sierra norte del Perú, en el departamento de Cajamarca, a 9 kilómetros de la ciudad de Celendín.
Sus más de 500 kilómetros cuadrados de extensión abarcaron el hoy distrito de Oxamarca, siendo separado el año 1923 por Ley N° 4860.
EXTENSIÓN
La extensión actual es de 271 kilómetros cuadrados según el Instituto Geográfico del Perú.
LÍMITES
Por el norte, desde Cumullca, el camino que conduce de Celendín a Cajamarca hasta la Loma del Indio, una línea que pasa por los cerros de Koriquingre y Lanchepata hasta la tranca de Jorge Chávez, de este punto una línea que pasa por el Poroporillo y la línea divisoria de las comunidades de José Gálvez y Sucre hasta la tranca de Cumbat.
Por el sur, el río Cantange, hasta sus orígenes en el río Pachachaca.
Por el este, una línea que partiendo de la tranca de Cumbat pasa por el primer tragadero de la laguna del Huauco a la cima del cerro Huaytorco y de este punto en línea recta, con dirección sur hasta el río Cantange.
Por el oeste, la cordillera entre Mishacocha y Cumullca.
SIGNIFICADO DE SU NOMBRE
Pese a los buenos deseos de quienes pretenden disfrazar la palabra Huauco vinculándola a los idiomas Quechua y Aymara, no ha sido posible encontrar en esos idiomas a este topónimo tan añejo y por añejo misterioso.
Pero quienes afirman que Huauco proviene del Quechua, no mencionan sus variantes del idioma inca: sureño, norteño o selvático, el Aymara se focalizó en Puno y el Alto Perú.
La palabra Huauco no existe en lengua Quechua ni Aymara como así lo aseveran quienes con tangible esfuerzo exclamatorio de un sentimiento excelso por la patria chica. Huauco no quiere decir tierra fangosa, ni hermano, ni bejuco, música, ni danza, esas son opiniones atrapadas en un subjetivismo emocional, escritos solo a modo de justificación que no pueden ser probados con documentos.
Con el temor de caer en ese subjetivismo ilusorio, pensamos que Huauco sería una palabra CULLE.
El Culle, llamado también Culli o Ilinga, fue el idioma primario de los antiguos indígenas del antiguo Perú.
En Sucre, quedan algunas palabras de este viejo idioma y son de uso corriente, ellas son: captay, ambulco, aporcar, pájaro; prefijo she y el sufijo sha, ejemplo caracasha y shecshe.
Por lo dicho, bucear en las aguas de esta lengua, casi extinta, es una necesidad para los investigadores e interesados en descubrir el velo misterioso que envuelve al nombre del Huauco o Guauco; cuya escritura es tan ignorada como desconocida, tanto por los huauqueños de ayer como por los sucrenses de hoy.
EVOLUCIÓN DE SU HISTORIA
La historia de Sucre, con criterio didáctico, se divide en 4 etapas: Pre inca, inca, colonial y república.
PRE INCA: Existen vestigios, fácilmente atribuibles a esta etapa; son restos humanos de gentiles que se hallan en varios lugares de la zona pertenecientes al gran imperio Huari (650 – 1100 años antes de Cristo) que después de su derrumbamiento, según Luis G. Lumbreras, su población fue diseminada por el norte, centro y sur del país. Lo confirman las ruinas de Sombrerillo, Coñorcoto, La Lechuga y otros hallazgos encontrados como pequeñas huacas y tumbas de formas cilíndricas esparcidas en las faldas de los cerros circundantes.
ETAPA INCA: El inca Huayna Cápac en su paso a Chachapoyas pudo verificar que la organización política y social de su gobierno en ese lugar era acatado conforme a las normas establecidas del imperio del Tahuantinsuyo.
Entonces Cajamarca estaba dividida en 7 Guarangas, de las cuales una correspondía a la guaranga de Cajamarca, integrada por las actuales provincias de Cajamarca, Contumazá, San Marcos, San Pablo y Celendín. A esta última la integraron tres Pachacas, que de acuerdo al estudioso celendino el profesor Pelayo Montoya Sánchez fueron la pachaca de Múyoc, Chimuch y la pachaca de los Cusichams, en la actualidad conforman los distritos de Celendín, Utco, José Gálvez, Huasmín y Sorochuco.
ÉPOCA COLONIAL: Con la llegada de los españoles y tras el asentamiento de las colonias, las siete Guarangas de Cajamarca pasaron a formar parte de la encomienda de Cajamarca de acuerdo al orden territorial de la Corona.
El conquistador Francisco Pizarro entregó la encomienda al encomendero Melchor Verdugo, un hombre falaz y cruel, que hizo honor a su nombre al ejercer con ferocidad su cargo en contra de los naturales.
Posteriormente las encomiendas fueron reemplazadas por los corregimientos debido al abuso despiadado de los encomenderos.
Entre los pueblos pequeños como Sucre, gobernaron los Caciques, quienes tenían el encargo de cobrar los TRIBUTOS para los encomenderos.
El año 1628 posee las tierras del Huauco el Cacique Diego Tantaquilich, apodado Diego Potosí, en donde cría yeguas y caballos y, cultiva productos de pan llevar, según anota la historiadora Consuelo Lezcano Merino.
A su muerte, el cacique deja en herencia las tierras del Huauco, a su hija natural de nombre Micaela Tantaquilech que se casa con Rodrigo Caruacushma, refiere la historiadora autora del Adviento de Celendín; Rodrigo Caruacushma compuso 5 fanegadas de tierras en el Huauco y procreó 5 hijos en doña Catalina: María Magdalena Caruacushma, Constanza Pacuay, Catalina y Marcos.
Don Rodrigo lega sus tierras bajo testamento del año 1632 a sus 4 hijos declarándoles herederos universales.
El virrey Pedro de Toledo y Leyva, Marqués de Manchera, el año de 1784 cumple con disponer la nueva división política del Perú en Obispados, Partidos, Parroquias y Semi Parroquias de la Intendencia de Cajamarca.
En este estado lo encuentra San Martín en 1820, fecha en que el Obispado de Trujillo pasa a ser Departamento, quedando Sucre como distrito de la provincia de Cajamarca; pero sin resolución.
ÉPOCA REPUBLICANA: Instalada la República después de intensas guerras pro independentistas, en las que los Hermanos Silva, hijos del sucrense don Toribio Silva, protagonizaron acciones importantes al alzarse contra el virrey Abascal el año 1809, entregando sus vidas y su fortuna a favor de su ideal, lograda la independencia en 1821 y sellada en 1824, el destino del Perú se encarriló en una nueva etapa.
Desde el punto de vista legal, Sucre fue creado como Distrito con municipalidad propia el 17 de julio de 1857 por decisión de la Convención Nacional de acuerdo al Art. 1 de la Ley de Municipalidades sancionada el 1 de diciembre de 1856 y ratificada el 2 de enero de 1857.
La Resolución del 17 de julio de 1857 es para el pueblo de Sucre el trampolín hacia su desarrollo y para futuras resoluciones, pues el 31 de agosto de ese mismo año la Convención Nacional elige el primer cuerpo municipal, siendo nombrado alcalde don José María de Silva y, para regidores a los señores Clemente Díaz, Antonio Chávez, Braulio Sánchez y Teodoro Rojas.
El primer acto de la novísima administración edil fue elaborar el llamado Plan del Pueblo, que consistió en el trazado de calles y de la Plaza de Armas, en este lugar se reservó espacios para la construcción del Palacio Municipal y de la Iglesia.
El pueblo nació con dos barrios, el primer barrio comprendido entre la parte izquierda de la plaza y el segundo comprendido entre la parte derecha.
En el mes de noviembre de 1898, el gobierno de don Nicolás de Piérola expidió una ley que le otorgó la categoría de VILLA al bizarro pueblo.
En 1940, el distrito de la laguna y de la totora cambia su nombre histórico, exótico y desconocido, pasando a llamarse Sucre, en memoria, según su mentor el diputado Clodomiro Chávez Mariñas, del Mariscal Antonio José de Sucre, para nosotros un militar traidor y escisionista.
La ola migratoria iniciada en los años 70, ha provocado una grave situación de despoblamiento de la ciudad otrora potente, habitada por gente trabajadora de probada honradez y cultura de valores.
CONCLUSIÓN
Sucre, en la actualidad es un pueblo que carece de una monografía que nos muestre una verdadera historia del pueblo, que vaya más allá de lo que escribió con profundas lagunas el escritor y poeta Nazario Chávez Aliaga.
La crisis generalizada que vive el Perú a causa de la corrupción y la política devaluada de los políticos mercaderes también han afectado al pueblo; por lo que en Sucre ese oasis de paz y de concordia se ha terminado.
[Artículo publicado en la Revista Oígaste N° 004 – Edición julio 2020]